La Gaceta

En el panorama sanitario de la soja se destacó la muerte súbita Los Nematodos pueden causar pérdidas de hasta

La podredumbre húmeda del tallo registró valores de incidencia del 25% al 70% Algunos no se erradican, por lo que hay que convivir con esos animales microscópicos

Durante el XXIV° Taller de Variedades y Manejo de soja 2021, organizado por la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc), Sebastián Reznikov, de la sección Fitopatologia de la entidad, trazó el panorama sanitario del cultivo para la actual campaña.

Destacó que dentro de las enfermedades que afectan el tallo y la raíz del cultivo figura el síndrome de la muerte súbita (complejo de Fusarium spp.), con valores de incidencia de hasta un 25%. También destacó la podredumbre húmeda del tallo (Sclerotinia sclerotiorum), con valores de incidencia de un 25% al 70% para lotes comerciales ubicados en el sur de la provincia y en las localidades catamarqueñas de Los Altos y de El Abra.

En cuanto a las enfermedades que afectan la parte aérea de la soja, la mancha anillada (Corynespora cassiicola) y la mancha ojo de rana (Cercospora sojina) fueron las más importantes para el ciclo agrícola 2020/2021: presentaron mayores valores de severidad y de incidencia, respecto de la campaña pasada.

Una particularidad de la campaña 2020/2021 fue la detección tardía de la roya asiática de la soja en Tucumán (8 de abril), cuyo progreso alcanzó un valor máximo de severidad de un 5% en lotes sembrados durante la primera semana de enero, aunque no afectó el rendimiento del cultivo.

Luego se presentaron resultados de ensayos de control químico para el manejo de mancha anillada y mancha ojo de rana en los cuales se utilizaron mezclas de fungicidas de sitio de acción específico y multisitios. Luego, Miguel González presentó resultados de ensayos de control biológico y químico realizados en la localidad de Los Altos (Catamarca), para manejo integrado de la podredumbre húmeda del tallo (S. sclerotiorum).

“El cultivo de soja es afectado por diversas plagas; entre ellas, los nematodos fitoparásitos, animales microscópicos que viven en el suelo y se alimentan principalmente de las raíces de las plantas cultivadas”, contó Norma Coronel, de la sección Zoología Agrícola de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc) en su disertación en el XXIV° Taller de Variedades y Manejo de soja.

Explicó que estos insectos ocasionan pérdidas de rendimientos, al interferir con la absorción del agua y de los nutrientes. “Se destacan por incidir negativamente en los rendimientos de la soja el nematodo del quiste de la soja (Heterodera glycines) y el nematodo de la agalla (Meloidogyne javanica, Meloidogyne incongnita y Meloidogyne spp.). Están ampliamente distribuidos en la zona sojera de Tucumán. Las altas temperaturas, los suelos sueltos y el monocultivo favorecen el desarrollo de estos organismos”, dijo.

Durante las campañas 2019/2020 y 2020/2021 se observaron daños puntuales debidos a estos nematodos en lotes del este y del sur de la provincia, con pérdidas que rondaron los 500 kg por hectárea según estimaciones de productores. “El signo típico del ataque del nematodo del quiste es la presencia de hembras y de quistes adheridos a las raíces”, contó. Añadió que se detectó en varios lotes de soja de la localidad de Los Pereyra, en altas densidades poblacionales. “Su presencia estuvo asociada a síntomas similares a los del ‘síndrome de la muerte súbita’: clorosis y necrosis internerval. Las plantas con síntomas más severos también estaban infectadas por el patógeno Fusarium tucumaniae (determinaciones hechas en la sección Fitopatología-Eeaoc)”, dijo. Agregó que el nematodo de la agalla se caracteriza por inducir la formación de agallas en las raíces de las plantas atacadas. Se presentó afectando lotes de soja de la localidad de La Cocha.

Las poblaciones de este nematodo fueron elevadas, entre 681 y 1.858 juveniles cada 100 cm³ de suelo. Los síntomas fueron rodales con plantas de menor porte y plantas muertas. “Estos nematodos no pueden erradicarse de los lotes infestados; hay que convivir con el problema. El empleo de cultivares de soja resistentes y la rotación con cultivos no hospederos son las principales prácticas de manejo para reducir el daño producido por ambos nematodos. La detección temprana y una correcta identificación de estos son herramientas esenciales para recomendar tácticas de control más apropiadas para el manejo de estas plagas”, explicó.

RURAL

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2021-07-31T07:00:00.0000000Z

2021-07-31T07:00:00.0000000Z

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